viernes, 9 de marzo de 2007

Conflicto


Un conflicto, eso es lo que es.
Una guerra constante, con bombardeos, batallas y sufrimiento.
Unas trincheras que se extienden por todos los lados.
A veces ganan unos, a veces otros. Pero, ¿por qué? ¿cuál es el motivo? ¿Quiénes son los buenos y quiénes los malos?

La mente es el bando conservador, en este caso reprimido, calculador, frío, rencoroso, cuesta decirlo, pero coherente.

Por otro lado están los sentimientos, el corazón, la pasión, la lujuria, el placer, esa parte que no se preocupa, que no se reprime, que tira adelante. Es por así decirlo el gbando revolucionario.
Pero como suele pasar en la mayoría de los casos, siempre destaca por una mala organización y no tener claro qué es lo que quieren.

Pero lo peor es, ¿quien debe ganar?

Teóricamente los coherentes, los que no se equivocan, pero que se mantienen siempre en el mismo estado, paciente, muerto, vegetativo.
Paradójicamente han ganado los rebeldes siempre al final. Nuevos cambios, un progreso, nuevas emociones ... nuevos conflictos.

Esos sentimientos luchan, salen a delante, pero la cabeza, la sensatez pone unos muros, tan altos, muy gruesos... No quiere mirar al otro lado, no quiere saltar... CENSURA.

Aquello con lo que siempre he prometido no vivir, aquello que siempre he intentado evitar, pero que el subconsciente siempre la saca por dónde sea.

Y no es sólo eso. Tal y como pasa en todas las guerras, están lo que apoyan a un bando y otro.
Y no sé porqué me d por pensar que el más poderoso apoya a la mente, rechaa todo trazo de rebeldía, de libertad, de expresión...

Hasta que la tierra sangra, está herida.

El campo de batalla ... llueve ...

Un barrizal, una tierra yerma, desierta, ... y sangre ...

Destrucción, pena, dolor, sufrimiento, ira, rencor, represión, ... muerte.

¿Eso es lo único que queda al final?

¿Es eso lo que merezco?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo siento, Alba. Últimamente he estado un pelin ausente.

Las Pesquisas me han causado...uhmmm...un disgusto de considerables proporciones, digamoslo así. Han sido eliminadas, no queda ni rastro de ellas. Y no lo lamento.

Me sigue encantando lo que escribes. En mi caso, ambos bandos han llegado a firmar un tratado de paz estable. La guerra ha tocado a su fin. Ha sido declarado el armisticio incondicional. Y lo prefiero.

Ya ves que en algunos casos ambos contendientes pueden llegar a un acuerdo, darse la mano y enterrar el hacha de guerra. Mi pregunta es esta, ¿cuánto más han de durar las luchas encarnizadas?.

Un besote muuuuy gordo. Nos vemos el finde que viene en el concierto de CERO COMA (Del que, por cierto, todavía no he visto una entrada publicitaria por aqui xD)

Anónimo dijo...

Ahora empiezo a entender...