jueves, 29 de mayo de 2008

Aún estoy esperando


Y así me dejó,
triste.

"Gracias por venir, por hacer esto por mí"

Así me lo pagó
sabiendo que yo sufría.
Y lo ignoró.

"No me importa, lo hago por ti"

Luego, se me presentó con tanta cara,
pero no tuve más remedio
que asentir
sonreir,
y hacer como si nada hubiese pasado...

... y como si lo que dije,
[2 veces]
no lo hubiese escuchado jamás.

Cada vez que me viste con la cabeza agachada,
porqué me preguntaste que pasaba,
si ya lo sabías.

Y lo peor,
es que lo entendías.

Pero al fin y al cabo te dio igual.
Por eso estoy así ahora,
sintiendome culpable...

triste
, desconcertada, desmoralizada...

6 comentarios:

Mr. TAS dijo...

ante una situación así, no cabe otra que preguntarse por el valor que tiene, y sobre lo que aporta una persona así, al lado nuestro.

aunque se queda uno echo polvo, a la larga es para bien. desde una perspectiva más amplia, la que se consigue con el tiempo y otras personas, te das cuenta que ésto es tirar lastre.

un saludo

Adriana Bañares dijo...

Los que ignoran son unos ignorantes.

besitos naranjas.

P.D: la de las fotos de las últimas entradas eres tú?

maloles dijo...

Me "paseaba" y encontré esto:)
Me ha gustado, y las fotos ¿son tuyas? Están muy bien.
Ugh... odio decir estas cosas que suenan a tópico.
Pero hoy estoy espesa y no se me ocurren cosas atópicas y atípicas.



Mua*

Erebus dijo...

Y la vida está llena de callejones sin salida y de puertas cerradas, y que se cierran y también que se abren.
Y si te dieron con una puerta en las narices y te dejaron sola, hay otras mil por las que podrás pasar. Que una traición no empañe tu vida. Los puñales se sacan. Las heridas sanan. La vida es cruel y buena también. Y hay capullos, claro que los hay, a patadas "Si los hijoputas volasen, no se vería el cielo". Pero no son los únicos, por suerte.

anabolizante dijo...

ni se te ocurra echarte las culpas!!
cabeza alta, sonrisa (aunque sea forzada) y más tiesa que el palo de un mocho!!
Ese es el espíritu!

C. Chase dijo...

Soy un electroduende
y nadie me comprende.