Hace un año

Hoy, hoy hace un año de aquello.


Hoy hace un año que comenzó la etapa más dura de mi vida.


Hoy hace un año que cambié y dejé de ser la que era.


Hoy hace un año que soy quien soy.


Hace un año que comenzó mi metamorfosis.


Un año, que comencé a llorar lotas las noches.


Hoy hace un año que descubrí lo que era ese dolor que te entra por dentro.


Hace exactamente un año, que descubrí mi mala suerte, que me condené a mi misma, me engañé por completo...





Hace un año que dejé de ser yo.





01-05-06





Me despierto y descubro que estoy en mi cama, en mi habitación, rodeada de mis cosas, después de tantos días. Y lo primero que hago es recordar...





Hace una semana que no duermo en mi cama.


He estado toda una semana en una habitación diferente, una cama desconocida, una casa extraña, un pueblo lejano, ... muy lejano.


Nada menos que más de 3000 km de Logroño.


Fue una semana inolvidable, llena de inquietud, nervios, pero estaba contenta, era feliz. Y no sabía que iba a ser los últimos días de felicidad en mucho tiempo.





Recuerdo el último fin de semana allí...





El viernes por la noche, una fiesta de un pueblo.


Un montón de gente desconocida, un desconocido en particular...





Recuerdo el sábado en el parque de atracciones, y por la noche el extraño licor de fresa.





Recuerdo la noche del domingo.


Un billar, una foto.


Una hoguera, una barbacoa, salchichas, cerveza...


Recuerdo una conversación en el arenero para niños, recuerdo que me llamaron al móvil.


Recuerdo la gélida noche que hizo y recuerdo mi cabeza sobra su hombro.


En lo alto de una torre de madera, de los juegos infantiles.


Recuerdo que estaba temblando, recuerdo los faros de un coche deslumbrándome y luego...


Recuerdo a un desconocido marchándose en bicicleta.





Recuerdo el día siguiente.


Recuerdo una fila de facturación y un desconocido apareció por la puerta con un bote de cocacola en la mano.


Recuerdo que hacía sol, recuerdo un cigarrillo en el suelo, unos ojos azules y una sonrisa triste.


Un abrazo... y tres palabras: Ich liebe dich.


Recuerdo soltar su mano,una figura alejándose...





Y no recuerdo nada más.





Lo único que viene a mi mente son meses y meses de estado vegetativo, de no saber quién era, de no importarme nada, de ira, de odio, de pena, ¿nostalgia?, de rabia, vergüenza, indiferencia, olvido...





Hace un año de todo esto.





La única conclusión que saco es que he aprendido.


He crecido, ¿madurado?, no me he arrepentido.





Ahora lo que siento es lástima, por mí misma. Por haber sido tan estúpida, pero no cabía esperar más, se tan sólo era una cría. Y lo sigo siendo, pero una cría escarmentada.


Lástima por haber desaprovechado un tiempo precioso en mi vida.


Por ser tan ilusa, ... , tan tonta, por haber sido borde con los demás.





Lo siento, pero, es que hace un triste año de aquello...